Uno de los órganos más importantes necesita estar bien entrenado para funcionar correctamente. Conocé cuáles son los mejores hábitos para tu cerebro.
La frase “la práctica hace la perfección” es una de las más trilladas en el lenguaje castellano. Sin embargo, los científicos especialistas en el cerebro no están tan de acuerdo con eso. Varios estudios señalaron que la práctica incesante puede no ser la forma más eficiente de aprender una nueva habilidad.
El cerebro es un organo que necesita descansos para consolidar el conocimiento recién adquirido y transformarlo de un recuerdo transitorio a un recuerdo duradero.
Cerebro: ¿cómo aprender cosas nuevas?
Uno de los hallazgos más recientes es que los descansos breves intercalados con la actividad conducen a grandes ganancias de aprendizaje: el cerebro aprovecha estos descansos para realizar una “repetición” mental rápida de lo que acaba de aprender, reforzando la habilidad recién adquirida.
Estos breves descansos pueden ser productivos para el cerebro de aquellos que practican movimientos nuevos, pequeños y repetitivos, como atletas o músicos, o incluso pacientes que intentan recuperar las habilidades perdidas después de un accidente cerebrovascular.
El Instituto Nacional de Salud (NIH) de EEUU publicó un informe en la revista Cell Reports, en el que registraron la actividad cerebral de 33 voluntarios diestros mientras aprendían a escribir una secuencia de números con la mano izquierda en el teclado.
Los voluntarios tenían que escribir tantas secuencias como fuera posible durante 10 segundos y luego tomar un descanso de otros 10 segundos. Observaron que, tras los breves intervalos, los voluntarios mejoraban la velocidad y precisión con la que tecleaban secuencias numéricas de este tipo.
Fuente: ambito.com